Inversión de Impacto: los microcréditos y su lado humano
- PROBLEMA SOCIAL
Uno de los grandes desafíos de la sociedad es la enorme desigualdad social y económica que existe en el mundo. Sabiendo que los países sumamente ricos destinan un escaso porcentaje de su PIB a ayudas humanitarias y de desarrollo para el tercer mundo, podemos decir que es utópico pensar que por sí solos estos colectivos de personas necesitadas y sin recursos se puedan autofinanciar o acceder a ningún tipo de crédito.
¿Y si existiese algún proyecto económico a menor escala, que permitiese a estos sectores de la población desfavorecida adquirir una serie de conocimientos esenciales, de forma que aprendiesen a suplir sus necesidades básicas económicas y por tanto, a desenvolverse en una sociedad para poder vivir y no solamente sobrevivir?
Para conseguir que una sociedad funcione y siga adelante por sí misma, no podemos simplemente, intentar evitar que no mueran de hambre o de enfermedades curables; también hay que conseguir, que se desenvuelva por sí misma y que aprenda a adquirir por cuenta propia lo que actualmente abastecen las organizaciones humanitarias.
Ver el mundo de la economía desde una vertiente humana, desde el punto de vista social, teniendo en cuenta valores morales y éticos, ver el mundo como un lugar donde las comunidades de personas se ayudan entre ellas para un bien común de todos, donde la superación del grupo permite crear herramientas que mejoran la vida de millones de personas.
Uno de los grandes ejemplos de empresas sociales que han cambiado la vida a millones de personas son los microcréditos. Este concepto, que fue elevado a la agenda mundial por Muhammad Yunus en los años 90 y por el cual el mismo ganó un Premio Nobel de la Paz en el año 2006, lleva décadas ayudando a que millones de personas salgan del umbral de la pobreza. Por esta razón hoy queremos destacar el ejemplo de una entidad de microcréditos por su gran impacto social: WINKOMUN
- CONCEPTO Y ACTIVIDAD
WINKOMUN es una plataforma libre que te ofrece la ayuda y las herramientas necesarias para aprender su “metodología” de ahorro y microcréditos.
La clave de su éxito está en la confianza en las personas. ¿Y en quién más confías? En tus amigos y conocidos cercanos. Estas personas no tienen nada que ver con el mundo financiero. Ellas mismas ponen las normas básicas del funcionamiento, de la metodología y gestionarán todos los movimientos de grupo. Los ahorros que se generen son de todos los miembros, y todos ellos son responsables de lo que se hace con ese dinero controlando el sistema de ahorro y préstamos.
- IMPACTO SOCIAL
Esta metodología tiene un impacto social directo en las personas que están normalmente bajo el umbral de pobreza; muchos son campesinos, artesanos, mujeres solteras, cabezas de familia, pensionistas, etc.
Es un impacto social en un colectivo de personas que no tiene estudios superiores, sin grandes ambiciones; se trata de personas, muchas de ellas analfabetas, que necesitan en algún momento algún préstamo para sobrevivir. Esta es una oportunidad para aprender a gestionar el crédito pedido y para ser responsables de devolverlo y levantar su proyecto.
Su objetivo es hacerles accesibles unos recursos financieros previamente inalcanzables en las condiciones más favorables posibles, para mejorar su día a día, arreglar una avería de la casa, comprar libros escolares, una factura imprevista o incluso arrancar un primer negocio.
- MODELO DE NEGOCIO
Los microcréditos o metodología de los grupos de ahorro, se utilizan en todo el mundo y han demostrado ser una herramienta poderosa con las que las comunidades pueden mejorar su situación y progresar económicamente, sin necesidad de ninguna ayuda de ninguna entidad financiera.
Un microcrédito es un pequeño préstamo ofrecido a una persona sin recursos que no dispone de ningún aval o garantía de devolución, por un banco u otra institución financiera. Pero teniendo en cuenta que:
- El microcrédito no es caridad.
- El microcrédito no es dinero entregado a fondo perdido.
- El microcrédito no es sólo entregar un préstamo de pequeño importe.
- El microcrédito no es un crédito para el consumo.
- El microcrédito no es sólo un préstamo para emprendedores.
El microcrédito únicamente financiará a aquellas personas que lo necesiten, personas en riesgo de exclusión que, por una u otra circunstancia, se encuentran excluidos del sistema financiero tradicional.
- ESCALABILIDAD
La metodología utilizada en WINKOMUN y actualmente presente en 45 países, ha recibido varios reconocimientos internacionales, está dentro del programa Globalizer de la red internacional de emprendedores sociales de ASHOKA por lo que podemos decir que es un proyecto de gran escalabilidad debido a su modelo de autogestión que permite llegar a muchas personas sin la necesidad de conseguir mucho financiamiento.
Por suerte, hay muchas personas en el mundo con ganas de ayudarse mutuamente y de construir un proyecto común entre su círculo más intimo.
Si quieres ver en detalle cómo funciona la metodología WINKOMUN mira este vídeo.
Si conoces algún otro proyecto que tenga un alto impacto social déjanos un comentario.